Si eres un apasionado de la nieve, en esta entrada te contamos la forma más cómoda y segura de transportar tus tablas o esquís.
El invierno es la época en la que los amantes del esquí pueden disfrutar de su afición favorita. Si eres uno de ellos y viajas en coche hasta las estaciones, debemos recordarte que los esquís son objetos rígidos, alargados y estrechos que si no están bien sujetos pueden convertirse en un peligro real para peatones u ocupantes de otros vehículos, o incluso para ti mismo si los llevas en el interior.
La variedad de modelos para el transporte es enorme. Muchos de ellos se acoplan a las barras de techo del coche, sobre las que se puede instalar un portaesquís o un cofre para llevar todo el material cubierto, pero los hay también magnéticos, que no necesitan barras de techo y puedes ponerlos sólo cuando los necesitas.
Son los más cómodos, permiten ponerlos y quitarlos con facilidad.
En su instalación, hay que tener muy en cuenta limpiar y secar bien el techo para una correcta adherencia de los imanes y una mayor seguridad del portaesquís.
El Cruz Aconcagua, permite viajar a una velocidad máxima de 130 km/h y realizar trayectos largos sin ningún problema, características con las que no todos los portaesquís magnéticos cuentan, además tienen sistema de seguridad antirrobo.
Es la forma más segura de transportar tus esquís o tablas. Para usuarios que acudan a las pistas con asiduidad, son los más recomendables ya que, una vez instalados, no es necesario ponerlos y quitarlos cuando termine el día. La primera instalación es un poco más compleja.
Estos portaesquís van siempre instalados sobre barras de techo, lo que te hace tener en cuenta la compatibilidad entre ambos.
No cuentan con limitación de velocidad, pero aumentan el consumo ya que ocupan más espacio en el techo.
Los puedes encontrar en diversos colores, para diferente número de esquís/tablas y todos los de nuestro catálogo cuentan con sistema antirrobo. ¡Son la mejor opción!